Segundo Domingo del Tiempo Ordinario Enero 16, 2022

Jesús vino a crear una nueva humanidad. El da inicio a su ministerio, el de transformar la persona humana, manifestando la bondad de Dios al hacer un milagro durante el banquete. Jesús realiza la transformación del agua durante la fiesta de las Bodas de Caná, cuando se percata de que los recién casados se han quedado sin vino. En otro banquete, celebrado antes de Su muerte, El instituye el sacramento de la Eucaristía para que nosotros podamos ser nutridos y podamos ser como El.

La bondad de Dios, en la Persona de Jesús, se manifiesta ante nosotros durante la transformación del agua en vino y la instauración de la Eucaristía. La presencia de Cristo en nuestras vidas transforma las tibias aguas de nuestro amor, en el vino del amor de Dios. El amor divino nos revigoriza y nos fortalece a lo largo del camino que nos conduce hacia la plenitud, que es Jesús viviente.

En el Evangelio de hoy María, convencida de que Jesús proveerá el vino para los recién casados, le comenta a Su hijo la necesidad que se ha presentado. Del mismo modo, nosotros debemos pedir a Dios con confianza que nos ayude con las necesidades espirituales y temporales que tengamos. En la Plegaria a Dios diariamente pedimos por la llegada del Reino de Dios, y por que se haga la Voluntad de Dios. Pero Jesús también nos dijo que debemos pedir a Dios por el pan de cada día.

Cuando estamos desanimados y nos sentimos desolados debemos plantear a Dios nuestra necesidad con pleno convencimiento de que El nos responderá de acuerdo a nuestras necesidades. Podemos decirle: “Presentarme ante Ti como soy es suficiente. Tu te harás cargo de mis miserias y mis necesidades como Tu lo desees”. Aún cuando Dios nunca nos dará más de lo que nuestro ego desea, tengan la seguridad de que El siempre nos proveerá todo lo necesario para nuestro bienestar. Siempre y cuando nosotros tengamos la disposición para aceptar Su presencia en nuestras vidas.

(Adaptado de los escritos de San Francisco de Sales, específicamente Los Sermones de San Francisco de Sales, L. Fiorelli, ed).